En mi última intervención en 7RM, abordamos una cuestión cada vez más frecuente en los tribunales: el uso de dispositivos GPS para vigilar o seguir a personas sin su consentimiento. ¿Se puede colocar un geolocalizador en el coche de tu pareja, hijo o trabajador? ¿Cuándo se convierte en delito?
Analizamos los límites legales, las implicaciones penales por delitos de acoso, revelación de secretos o vulneración de la intimidad, y la doctrina de los tribunales sobre el uso de estos dispositivos.
📺 Puedes ver la entrevista completa aquí: https://youtu.be/n9dpgYS8rMM