La sentencia refuerza la protección de los vínculos afectivos y rechaza la primacía automática de la filiación biológica en materia indemnizatoria
Por Luis Ferrer Abogado – www.luisferrer.abogado
Introducción
El Tribunal Supremo ha reconocido el derecho a una indemnización por fallecimiento a favor del hombre que actuó como padre “de facto” de un joven que murió en un accidente, en detrimento del padre biológico, quien había desatendido completamente sus responsabilidades parentales desde 1998.
La sentencia establece que la relación afectiva y de crianza prevalece sobre el mero vínculo biológico cuando se trata de compensar el perjuicio derivado de la muerte de un ser querido.
Este fallo amplía el concepto de perjudicado en casos de indemnización por fallecimiento, reforzando la protección de los lazos familiares y afectivos reales, frente a los criterios estrictamente legales basados en la filiación.
1️⃣ Hechos del caso
🔹 Un joven falleció en un accidente de tráfico, generando el derecho a indemnización para sus familiares y allegados.
🔹 El padre biológico, que llevaba más de 25 años sin relación con su hijo, reclamó su derecho a la indemnización.
🔹 Sin embargo, el hombre que realmente crió al joven y ejerció como su padre durante toda su vida también presentó una reclamación.
🔹 El Tribunal Supremo falló a favor del padre “de facto”, argumentando que el biológico no tenía un perjuicio real por la muerte del joven, mientras que el padre de crianza sí había mantenido una relación afectiva y económica constante con él.
📌 Conclusión: El tribunal priorizó la relación afectiva real sobre la filiación biológica en la asignación de la indemnización.
2️⃣ Fundamentos jurídicos de la sentencia
El Tribunal Supremo basó su decisión en dos principios clave:
✔️ El perjuicio real como criterio para la indemnización
- El artículo 3 del Baremo de Tráfico establece que las indemnizaciones deben compensar un daño efectivo y cierto.
- La falta de relación del padre biológico con el fallecido impide que pueda considerarse perjudicado.
✔️ El reconocimiento de los lazos afectivos como fuente de derechos
- La jurisprudencia del Tribunal Supremo reconoce que el daño moral por fallecimiento no debe limitarse a la filiación legal, sino que debe considerar los vínculos reales de convivencia y afecto.
- En este caso, la persona que cumplió el rol de padre fue quien realmente sufrió la pérdida.
📌 Conclusión: La sentencia rompe con la idea de que la indemnización por fallecimiento debe concederse automáticamente al progenitor biológico, reforzando la protección de los vínculos de crianza.
3️⃣ ¿Qué implicaciones tiene esta sentencia?
🔹 Evita que padres biológicos sin relación con sus hijos puedan beneficiarse de indemnizaciones por su muerte.
🔹 Reconoce el derecho de las familias “de facto” a ser protegidas en casos de perjuicio real.
🔹 Abre la puerta a futuras reclamaciones basadas en vínculos afectivos, más allá del parentesco legal.
📌 Conclusión: El Tribunal Supremo refuerza la idea de que la indemnización debe responder a la pérdida emocional y material sufrida, no a un criterio meramente biológico.
Conclusión
El Tribunal Supremo ha emitido un fallo clave al otorgar la indemnización por fallecimiento al padre que realmente ejerció como tal, en lugar del biológico, quien no tuvo contacto ni responsabilidad sobre el joven durante más de 25 años.
Esta sentencia refuerza la protección de los lazos afectivos reales en materia indemnizatoria, estableciendo que la compensación debe dirigirse a quienes realmente sufren el perjuicio, y no a quienes solo mantienen un vínculo legal sin un verdadero compromiso parental.
Desde Luis Ferrer Abogado, recomendamos que en casos de reclamaciones de indemnización por fallecimiento, se analicen no solo los vínculos legales, sino también los afectivos y convivenciales, ya que pueden determinar quién tiene derecho real a ser compensado.
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