El TSJ de Asturias confirma una condena de dos años y medio de prisión por apropiarse de 91.650,80 euros de su tía con Alzheimer

ARTICULO DE OPINION

Aprovechamiento de la vulnerabilidad de la víctima
En un fallo reciente, el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJ) confirmó la condena a un hombre por apropiarse indebidamente de 91.650,80 euros pertenecientes a su tía, diagnosticada con Alzheimer desde 2012 hasta su fallecimiento en 2020. Este caso evidencia la gravedad del abuso de confianza y la explotación económica de personas vulnerables.

Los hechos probados
El acusado, sobrino de la víctima, comenzó a gestionar las finanzas de su tía tras el diagnóstico de Alzheimer. La mujer, soltera y sin hijos, le confió el acceso a sus cuentas bancarias. Sin embargo, el tribunal demostró que el acusado transfirió a sus propias cuentas una parte significativa de los fondos de su tía, destinándolos a gastos personales no justificados.

Implicaciones legales
El TSJ ratificó la condena de dos años y medio de prisión impuesta en primera instancia, considerando que el acusado cometió un delito de apropiación indebida, regulado en el artículo 252 del Código Penal. Este delito se configura cuando una persona, en perjuicio de otro, se apropia o dispone de bienes ajenos en virtud de una relación de confianza.

La sentencia también incluyó la obligación de restituir el dinero sustraído a los herederos de la víctima, destacando la importancia de la reparación económica del daño causado.

Aspectos éticos y sociales
El fallo subraya la responsabilidad moral y legal de quienes asumen el cuidado y administración de bienes de personas vulnerables. En situaciones de dependencia, el abuso económico no solo afecta el patrimonio de la víctima, sino que vulnera gravemente su dignidad y derechos fundamentales.

Medidas de protección
Para prevenir este tipo de situaciones, es crucial adoptar mecanismos de supervisión en la gestión de bienes de personas incapacitadas, tales como:

  1. Nombramiento de tutores legales supervisados: Contar con una figura legal que rinda cuentas ante el juzgado.
  2. Controles periódicos de cuentas: Revisiones financieras por parte de un tercero independiente.
  3. Concienciación y denuncia: Informar a familiares y vecinos sobre los signos de abuso económico.

Conclusión
Este caso establece un precedente en la protección de los derechos patrimoniales de personas vulnerables y en la condena de conductas abusivas. La decisión del TSJ de Asturias refuerza el compromiso del sistema judicial con la defensa de quienes no pueden protegerse por sí mismos, enviando un mensaje claro: el abuso de confianza tendrá consecuencias legales severas.

Luis Ferrer. Abogado