ARTICULO DE OPINION
En el ámbito laboral, la protección de la salud de los trabajadores es una prioridad fundamental. Dentro de este marco, surge una cuestión relevante: ¿puede una enfermedad agravada por el trabajo ser considerada como un accidente laboral? Para responder a esta pregunta, es necesario analizar la normativa vigente en España, así como la jurisprudencia relevante en esta materia.
Concepto de Accidente Laboral y Enfermedad Profesional
El artículo 156 de la Ley General de la Seguridad Social (LGSS) define el accidente de trabajo como «toda lesión corporal que el trabajador sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecute por cuenta ajena». Por su parte, una enfermedad profesional se define en el artículo 157 de la misma ley como aquella contraída a consecuencia del trabajo ejecutado en las actividades que se especifican en el cuadro de enfermedades profesionales, y que esté provocada por la acción de los elementos o sustancias que en dicho cuadro se indican para cada enfermedad profesional.
En este sentido, la diferenciación entre accidente de trabajo y enfermedad profesional radica en la naturaleza y la forma en la que se manifiestan. Sin embargo, hay situaciones en las que una enfermedad, inicialmente no catalogada como profesional, puede agravarse por las condiciones del trabajo, planteando la posibilidad de ser tratada como un accidente laboral.
Jurisprudencia y Criterios Doctrinales
La jurisprudencia española ha abordado en varias ocasiones la cuestión de cuándo una enfermedad agravada por el trabajo puede considerarse accidente laboral. Un caso relevante es la Sentencia del Tribunal Supremo de 10 de octubre de 2006 (RJ 2007\825), donde se estableció que «cuando existe una relación directa entre el trabajo realizado y el agravamiento de la enfermedad preexistente, este agravamiento debe ser considerado como accidente de trabajo».
Este criterio ha sido reiterado en diversas sentencias, donde se ha valorado la causalidad entre la actividad laboral y el empeoramiento de la salud del trabajador. La clave está en demostrar que las condiciones laborales han contribuido significativamente a agravar la patología del trabajador.
Requisitos para la Consideración de Accidente Laboral
Para que una enfermedad agravada por el trabajo sea considerada accidente laboral, deben concurrir ciertos requisitos:
- Existencia de una enfermedad preexistente: El trabajador debe padecer una enfermedad que, aunque no profesional, esté diagnosticada antes del agravamiento.
- Relación de causalidad: Debe demostrarse una relación directa y significativa entre el trabajo realizado y el agravamiento de la enfermedad. Esto implica que las condiciones del entorno laboral hayan influido de manera notable en el empeoramiento de la salud del trabajador.
- Evidencia médica: Es esencial contar con informes médicos que certifiquen el agravamiento de la enfermedad debido a las condiciones laborales. Estos informes deben ser claros y detallados, mostrando la evolución de la enfermedad y su relación con el trabajo.
Procedimiento para el Reconocimiento
El procedimiento para el reconocimiento de una enfermedad agravada por el trabajo como accidente laboral suele implicar varios pasos:
- Parte de Accidente: El trabajador debe informar a su empresa y solicitar la emisión de un parte de accidente de trabajo, donde se especifique la naturaleza de la enfermedad y su agravamiento.
- Informe Médico: Se debe obtener un informe médico que respalde la solicitud, detallando cómo las condiciones laborales han contribuido al agravamiento de la enfermedad.
- Inspección de Trabajo: En algunos casos, puede ser necesaria una inspección de trabajo para evaluar las condiciones laborales y determinar su impacto en la salud del trabajador.
- Reclamación ante la Seguridad Social: Si la empresa no reconoce el accidente, el trabajador puede presentar una reclamación ante la Seguridad Social, aportando todas las pruebas pertinentes.
Conclusión
En conclusión, una enfermedad agravada por el trabajo puede ser considerada como accidente laboral si se cumplen ciertos requisitos, principalmente la demostración de una relación causal entre las condiciones laborales y el agravamiento de la enfermedad. La jurisprudencia ha sentado precedentes claros en esta materia, y la normativa española ofrece mecanismos para la protección de los trabajadores en estos casos. Es fundamental que los trabajadores afectados cuenten con el apoyo legal y médico adecuado para garantizar sus derechos y recibir la protección que la ley les otorga.
Luis Ferrer. Abogado